Para contextualizar de lo que vamos a hablar, un certificado electrónico es un archivo que se instala en el ordenador y cuya función esencial es identificar a una persona.
Cada día es más frecuente realizar cualquier trámite con la administración pública usando para ello el certificado digital. Aun cuando existen alternativas sencillas, como el DNI electrónico o la Cl@ve PIN, es muy recomendable poseerlo, Entre otros motivos, porque te ahorrará desplazarte a las sedes de la administración pública y hacer cola.
Para que te hagas una idea de su utilidad, hay publicados una lista de trámites disponibles en la página web de la casa de la moneda que podrás realizarlos con tu certificado digital.
En España, la entidad emisora de este tipo de certificados los emite la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. El método para conseguirlo viene bien descrito en su portal web. Es recomendable antes de iniciar el proceso leer las instrucciones con atención y asegurarse de que la has comprendido.
Finalizada la primera fase, se te enviará un correo electrónico con una clave. Esta te será solicitada en tu administración de hacienda más cercana con objeto de verificar tu identidad. El proceso finalizará cuando instales en tu ordenador el fichero que se te envía a tu bandeja de correo electrónico.
El periodo de validez está determinado, finalizado el cual, tendrás que proceder a renovar tu solicitud.